Historia

Berlín, 6 de mayo.- El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean Claude Trichet, rechazó hoy las versiones sobre una eventual expansión de la crisis económica griega a otros países de la zona euro y aseguró que Portugal y España tienen grandes diferencias.

En rueda de prensa desde Lisboa, tras la reunión del Consejo de Gobierno del BCE en la capital portuguesa, Trichet expuso que España y Portugal no “están sentados en el mismo barco”.

El directivo del BCE mantuvo la posición de no caer en las presiones de agencias calificadoras mundiales y de los mercados financieros que ven a Grecia al borde de la quiebra y a otros países europeos como Portugal, España e Italia a punto de caer en la misma situación.

El Consejo de Gobierno del BCE no discutió este jueves la compra de emisiones de bonos griegos calificados de tercera clase por las agencias internacionales. Este órgano adelantó el lunes que era factible que así lo hiciera.

Trichet reveló que tampoco se abordó en la sesión de este jueves en Lisboa el proceder del BCE en caso de una quiebra del Estado griego.

“Conocemos el paquete de ahorro de Grecia muy bien y lo consideramos adecuado”, afirmó.

Enfatizó que “estamos firmemente al lado de Grecia” y es en esa perspectiva como se debe ver la reciente decisión del BCE de aligerar de manera excepcional las reglas y aceptar como seguridad bonos griegos de deuda.

El BCE había dado a conocer el lunes esa decisión excepcional, pese a que la agencia Standard and Poor’s había bajado la calificación de los bonos de deuda griega al nivel de basura.

Trichet afirmó que una abrumadora mayoría de los miembros del Conejo de Gobierno del BCE votó a favor de la medida de excepción para Grecia.

Con ello evidenció divergencias de opinión en el Consejo del BCE, porque en ese órgano las decisiones se toman por lo general en consenso y unanimidad.

El presidente del BCE recomendó a los gobiernos europeos aprobar y poner en marcha el paquete de ayuda de 80 mil millones de euros para Grecia.

El BCE mantuvo este jueves sin cambios las tasas de interés en la zona euro, porque “permanecen siendo apropiadas” en el nivel en el que se encuentran, según Trichet.

La tasa dirigente de operaciones de refinanciamiento permanece en 1.0 por ciento, mientras la tasa marginal para facilidades de crédito en 1.75 por ciento y la tasa para la facilidad de depósito seguirá en 0.25 por ciento, precisó.

Explicó que tomando en cuenta toda la información que se generó desde el pasado 8 de abril, cuando el BCE tuvo su sesión anterior, se espera que el desarrollo de los precios siga siendo moderado en un horizonte relevante para la política.

Dijo que las presiones inflacionarias globales, generadas en especial por los precios en los mercados de materias primas y en las regiones de rápido crecimiento económico, están siendo contrarrestadas por las bajas presiones de los precios domésticos.

Trichet expresó que tras analizar la información disponible, la recuperación económica en la zona euro confirma que seguirá siendo moderada en los primeros meses de 2010, pero que los patrones de crecimiento pueden ser desiguales entre los países europeos.

En el análisis del BCE se manifestó que las presiones inflacionarias permanecerán contenidas en el mediano plazo, como lo sugiere el débil crecimiento de la masa monetaria y del crédito. (Con información de Notimex/MCH)